Vaya donde vaya siempre dejo la huella de mi estilo y mi personalidad
Si la cosa pinta bien, puedes bromear haciendo planes de futuro (aunque sean absurdos y locos) sobre el perro que tendréis cuando os caséis y viváis juntos, o bien echarle la culpa al destino de que os hayáis conocido esa noche y de lo que os pueda tener preparado. Siempre con humor y haciéndola reír. Sigue leyendo
