Es voluptuosa y exuberante, de piel sedosa y curvas fantásticas
Borró el whatsapp y marchó al lavabo. Allí, su mano abarcó a la perfección la dureza prácticamente invencible de su pene erecto. Y allá, olvidado de todo, marcó el ritmo adecuado para vencer aquella dureza inoportuna y caprichosa que demandaba un alivio. Sigue leyendo
