O bien el amor tiene razones, que la razón desconoce proverbio francés
Puesto que, en aquella época, la supervivencia física de una mujer dependía de manera frecuente de contar con un hombre fuerte y valiente a su lado. Alguien capaz de apresar y matar animales salvajes. Alguien capaz de protegerla de tribus hostiles. Sigue leyendo